Con un ambiente cargado de gratitud y nostalgia se llevó a cabo una cena de confraternización en el Centro de Convenciones del Colegio de Médicos de La Paz, donde exresidentes del Instituto Nacional de Oftalmología (INO) se reunieron para celebrar los 50 años de vida de esta prestigiosa institución, que ha marcado un antes y un después en la salud visual de Bolivia.
El evento tuvo como propósito principal rendir homenaje a los ex profesionales del INO, visionarios que, con su vocación de servicio, compromiso y profesionalismo, sentaron las bases de un centro médico que, cinco décadas después, continúa consolidándose como un referente en la atención oftalmológica, la formación académica de especialistas y la investigación científica en el país.



La velada contó con la presencia especial a exresidentes que han dejado huella no solo en el país, sino también en el ámbito internacional, gracias a sus valiosos aportes en investigación oftalmológica. Sus logros, que han cruzado fronteras, representan con orgullo el espíritu académico y profesional que el INO ha promovido desde sus inicios, contribuyendo de manera significativa al avance del conocimiento médico en beneficio de la salud visual.
La cena se convirtió en un espacio para rememorar experiencias, compartir anécdotas y reafirmar lazos de amistad entre profesionales que, en distintas épocas, cumplieron funciones en el instituto. Algunos de ellos continúan ejerciendo su labor en el mismo centro, mientras que otros, desde diferentes regiones del país y del mundo, siguen aportando al desarrollo de la oftalmología.
El Instituto Nacional de Oftalmología ha beneficiado a miles de pacientes a lo largo de estos 50 años, devolviendo la luz de sus ojos a personas de todas las edades y condiciones. Su compromiso con la excelencia médica y la innovación lo ha posicionado como un modelo de referencia tanto a nivel nacional como internacional.
La conmemoración no solo fue un homenaje a las trayectorias individuales, sino también un reconocimiento al esfuerzo colectivo que ha permitido que el INO mantenga su liderazgo en salud visual. La reunión cerró con un compromiso para seguir fortaleciendo la labor de la institución, preservando su legado y proyectándolo hacia las próximas generaciones de oftalmólogos en Bolivia.